“Cuenta que al levantar el borde de la sábana que cubría al ahogado,
revivió en la cenagosa profundidad de pantano de sus ojos abiertos un barrio de
solares ruinosos y tronchados geranios cruzado de punta a punta por silbidos de
afilador; un remoto espejismo traspasado por el aullido azul de la verdad.”
Si te dicen que caí. Seix Barral. |
Título: Si te dicen que caí
Autor: Juan
Marsé
Fecha de publicación: 1973 (en México) y 1976 (en España)
ISBN: 84-322-0302-5
Págs.: 360
Editorial: Seix Barral
Sinopsis:
En palabras del autor, la novela
no es tanto una revancha personal contra el franquismo, como una secreta y
nostálgica despedida de su infancia. Lo cual no quita para que, en efecto, la
sórdida vida cotidiana en un barrio ya desaparecido (Guinardó) vuelva a ser el
marco de unas historias en las que se entremezclan la sátira y la violencia
sexual con una indiscutible riqueza de sensaciones y fantasías. Muchas de ellas
se cuentan mediante las "aventis", un hallazgo que permite, a partir
de historias inventadas por unos niños nacidos de la violencia y criados en la
calle, ir tejiendo una realidad alucinante y, al mismo tiempo, extrañamente
cotidiana.
Opinión:
¡Buenaaaaaas!
Hace unos días, terminé Si te dicen que caí, pero por unas o por
otras no me había dado tiempo a escribir la reseña hasta ahora. Bueno, más bien
por el hecho de que esta lectura no había sido escogida por puro placer sino
por un trabajo de literatura que tuve que entregar este pasado jueves.
Así que ya que he tenido que
sumergirme en mil hemerotecas y manuales, no me voy a centrar solo en la
historia sino que voy a compartir la información que he recopilado, eso sí, solo
a grandes rasgos –vamos, lo más interesante-.
Carmen Broto |
Allá por 1973, Juan Marsé (1933-
) escribió una historia a partir de un hecho que nunca olvidaría, la muerte de la prostituta Carmen Broto.
Él vivía en un barrio barcelonés ahora extinto, el Guinardó. Allí una noche vio
cómo mataban a una mujer, una vecina suya. Marsé supo siempre quién había sido el asesino y utilizó esa
información para moldear el libro que hoy nos concierne, aunque el resultado final no es la
verdad absoluta sino una mezcla de recuerdos e imaginación (las denominadas
“aventis”). Si hasta el propio asesino se puso en contacto con Marsé para
explicarle que así no se había producido exactamente el asesinato.
Si te dicen que caí estaba
preparado para su publicación pero no para España, recordemos que en 1973
se estaba viviendo bajo la dictadura de Franco y, por ende, había una censura
importante. Marsé, que tonto no es, sabía perfectamente que su novela no podría
ver la luz en España, así que decidió
presentarse a un Premio de Novela en México. Entre el jurado se encontraban
intelectuales de la talla de Vargas Llosa, quien solo tenía buenas palabras para
su historia, es decir, Marsé ganó y
gracias a ello pudo ver su obra publicada en México. No sería hasta tres
años después, en 1976, que Seix Barral
conseguiría publicar Si te dicen que caí
en España, ya que, a pesar de la muerte del Generalísimo (1975), la censura
no se había eliminado de un plumazo, costaría un poquito más de tiempo asumir
la nuera era.
Pero ¿por qué no podía publicarse en España? ¿Qué elementos dañinos
contenía para el franquismo?
Según el propio autor, tan solo
quería reflejar su juventud en Barcelona, pero en esta novela hay mucho más que
una muestra de la juventud barcelonesa de los años cuarenta. Nos encontramos ante una historia sombría
que describe a los “vencidos” de la Guerra Civil, es decir, aquellos que se
han quedado en la miseria, que no viven, sobreviven y que, por lo tanto, hacen
lo que sea por aguantar un día más. Básicamente, tenemos un repertorio de
personajes (niños, monjas, prostitutas, pobres, militares, rojos, de derechas…)
que se entremezclan. Marsé no tiene
un solo protagonista sino que todos ellos son parte importante de la historia.
Pero a lo que iba, la novela rezuma
rencor hacia el franquismo, si hasta el título es pura ironía, ya que Si te dicen que caí es un verso del Cara
al sol que, para quienes no lo sepáis, es el himno falangista español.
Podría hablaros de personajes
concretos y qué valor tienen en la obra, pero prefiero que no sepáis nada. Antes
de hacer cualquier trabajo de literatura suelo leer primero el libro sin saber
nada sobre él y, en este caso, ha sido una gran decisión porque, aunque al
principio pueda parecer un poco lioso, daréis
las gracias por esa progresiva sorpresa que te deja con muy
buen sabor de boca.
Las aventis:
Por cierto, me parece que no os
he explicado eso de las aventis. Cuando Marsé era pequeño y jugaba con sus
amigos (en plena posguerra española) no había juguetes, nada para entretenerse
excepto la imaginación, así que se dedicaban
a contar historias surgidas de los recuerdos y la inventiva. A estas historias las llamaban aventuras, pero como era una palabra muy larga se decidieron por aventis, al igual que
de bicicleta-bici, de aventura-aventi. Y este recurso es el que utilizaría,
años más tarde, para esta novela. Si la leéis, fijaos en que todo es un amasijo
de realidades posibles y mucha ficción.
En conclusión, es un libro complejo, muy interesante, entretenido, con
un estilo muy personal y que puede despistar un poco al principio (ya lo veréis
en los diálogos), con un final increíble, directo, explícito y que describe a
la perfección la miseria humana. O lo que es lo mismo, no es una lectura
rápida y típica para evadirse sino que es una novela para reflexionar
y que, seguramente, no guste a todos. Así
que la recomendaría a aquellos que tengan ganas de adentrarse en la posguerra
española y que estén dispuestos a disfrutar de una historia un pelín más
difícil que el típico best-seller.
¿Lo habéis leído? ¿Qué os parece la utilización de las aventis para
contar una historia?
Sobre el autor:
Nace en Barcelona el 8 de enero
de 1933, como Juan Faneca Roca. Su madre muere en el parto por lo que es
adoptado a las pocas semanas de su nacimiento por el matrimonio Marsé.
Asiste al Colegio del Divino
Maestro, hasta 1946. A los trece años empieza a trabajar como aprendiz de
joyero, oficio que desempeña hasta 1959.
En 1958 comienza a publicar sus
primeros relatos en la revista Ínsula
y El Ciervo.
Obtiene su primer premio en 1959
por su cuento Nada para morir y en 1961 es finalista del Premio Biblioteca
Breve de Seix Barral con su primera novela Encerrados con un solo juguete
(1960). En 1960, aconsejado por Gil de Biedma se traslada a París donde trabaja
como profesor de español, traductor, guionista y ayudante de laboratorio en el
Instituto Pasteur. Aquí conoce al Nobel Jacques-Lucien Monod, del que sigue sus
pasos comunistas afiliándose en el PCE. En 1962 regresa a Barcelona y publica Esta
cara de la luna, hoy repudiada por el autor y desterrada del catálogo
de sus obras completas.
En 1966 publica Últimas
tardes con Teresa que se lleva al cine en 1983 y con la que consigue
finalmente el Premio Biblioteca Breve de Seix Barral. A partir de esta novela
se dedica a su vocación literaria colaborando en diversas publicaciones y en el
cine. En 1970 es nombrado redactor jefe de la revista Bocaccio y redactor de la revista Art-Cinema. Durante este año, también publica La oscura historia de la prima
Montse.
Su novela Si te dicen que caí
(1973) se publica en México debido a la censura española, donde no se publica
hasta 1976 y se lleva al cine en 1989.
En 1978 obtiene el Premio Planeta
con La
muchacha de las bragas de oro. Su universo literario se asienta con Un
día volveré (1982), Ronda del Guinardó (1984) y su
volumen de cuentos Teniente Bravo (1987).
La década de los noventa supone
la consagración definitiva de Marsé. En 1990 recibe el Ateneo de Sevilla por El
amante bilingüe; en 1994 le conceden, por El embrujo de Shangai, el
Premio de la Crítica y el Aristeion. Escritor autodidacta, se define a sí mismo
como novelista catalán que escribe en castellano.
El 21 de abril de 2009, el
escritor deposita, en la Caja de las Letras del Instituto Cervantes, un legado
cuyo contenido permanecerá cerrado durante los próximos veinte años.
De libro a película:
Es una triste casualidad que
justo el día que incluyo una película de Vicente Aranda al blog, éste muera. En
fin, el fallecido director de cine en 1989 filmó Si te dicen que caí, la
adaptación de la novela homónima. Con un reparto de lujo: Victoria Abril,
Antonio Banderas, Jorge Sanz, Javier Gurruchaga, Guillermo Montesinos, Lluis
Homar, Juan Diego Botto…
Como curiosidad: a Marsé no le
gusta ninguna de las adaptaciones de sus novelas, ya que Aranda se dedicaba a
copiar diálogos íntegros en vez de adaptarlos. Por lo visto, no suena igual de
bien leído que en el cine.
¡Puntuación 5/5!
No lo conocía pero tampoco me atrae...
ResponderEliminarUn beso :)
Bueno, pues a la próxima ;-)
Eliminar¡Gracias por comentar!
No lo conocia pero parece muy bueno :o
ResponderEliminarMe alegra que te haya gustado tanto y gracias por la reseña, un beso :3
Sí, me sorprendió muy para bien.
Eliminar¡Gracias por pasarte!
He visto el comentario en mi blog en el que me hablabas de este libro. Así en principio no me atrae mucho, pero no lo descarto
ResponderEliminarUn beso, Reich!
Bueno, pues si al final cae espero que te guste =)
EliminarNo te arrepentirás.
¡Un saludoo!
Estoy que no la puedo soltar. Beso.
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