¡Bueeenas!
Después de una semana de descanso
entre libro y libro, volvemos con la cuarta entrega de la saga, El cáliz de fuego (The Globet of Fire).
Publicada en el 2000 por J. K. Rowling y traducida al castellano por Adolfo
Muñoz García y Nieves Martín Azofra un año más tarde, como siempre de la mano
de Salamandra.
En este primer capítulo, titulado
La mansión de los Ryddle, Rowling cambia de táctica, y, en vez de
hacernos un breve resumen sobre Harry, su cicatriz, Voldemort…, prefiere
meterse de lleno en la aventura que nos deparará esta nueva novela, ya que
da por sentado que sabemos quién es Nagini y Colagusano, entre otros.
Mansión Ryddle, Hangleton. |
La historia no comienza con el
cumpleaños de Harry como en entregas anteriores, sino que nos lleva a un pueblo llamado Pequeño Hangleton, donde hace cincuenta
años vivió en una gran mansión la familia Ryddle, quienes, por cierto,
eran, además de ricos y snobs, gente de esa que no quieres en tu vida, de los
que te miran por encima del hombro, sobre todo Tom, el hijo del matrimonio. Por
desgracia, un día cualquiera la familia
amaneció muerta. El problema es que no había sido un asesinato “normal”, es
decir, descartaron envenenamiento, ahorcamiento, apuñalamiento, asfixia…
estaban perfectamente, si exceptuamos el hecho de que sus corazones no latían.
Así que nosotros, los lectores, que ya tenemos cierto bagaje en lo que se
refiere al mundo mágico, podemos
entrever fácilmente que esos asesinatos tienen un toque más bien sobrenatural,
pues se comenta en pocas líneas que sus rostros reflejaban el puro horror,
vamos, que una piensa en La cámara secreta y aquel basilisco que
tanto la lió. Eso sin contar que ya conocemos de sobra el personaje de Tom
Ryddle aka Voldemort.
Voldemort con Nagini. Ilustración de Horologe. |
Pero, claro, eso lo sabemos los
magos y los muggles que tenemos el placer de leer esta saga, así que imaginaos
el panorama entre los vecinos que no habían oído hablar nunca de magia… El caso
es que la poli creyó coger al autor de
los crímenes, un tal Frank Bryce, el jardinero de la familia. Menos mal que no
hubo pruebas para llevarlo a prisión, porque pobre hombre, la verdad. En
fin, este señor siguió en su puesto, arreglando el inmenso jardín de la mansión
mientras pasaban por ella familias que no duraban ni un mes, hasta que, cuando
él contaba con setenta y siete años, un acaudalado hombre anónimo se hizo con
la casa, ¿a qué os hacéis una idea de quién puede ser?
Total, una noche Bryce ve luces
dentro de la mansión y entra temiendo que un grupo de niñatos esté haciendo
alguna jugarreta, pues ese anónimo nuevo dueño no se había quedado a dormir un solo día. Así que, ni corto ni perezoso, se hace todo el caminito con su
cayado –Frank tiene la pierna rígida, como las víctimas de Nagini-, hasta oír
la conversación de dos personas en una habitación:
- Colagusano, aquel Peter Pettigrew transformado en Scabbers durante casi tres libros, ha llegado al fin junto a su señor, Lord Voldemort. Sirius tenía razón sobre él.
- Voldemort está todavía súper bajo de defensas y se alimenta de Nagini, ¡Peter la ordeña! No puede dar más asquito…
- Han matado a una tal Bertha Jorkins, del Ministerio de Magia, y le han sacado información crucial para su próximo malvado plan.
- Pretenden liarla muchísimo justo después de los Mundiales de quidditch, ya que, como siempre, necesitan a Potter, y éste va a estar demasiado bien rodeado para el gusto del que-no-debe-ser-nombrado.
Después de que Rowling nos dé
toda la información importante para empezar la novela a tope, aparece Nagini,
quien descubre al inocente Frank, y Voldemort, no sin antes asustarle con sus
pintas de tío a medio hacer, lo mata antes de que toque el suelo. Si es que en el momento en que nos dicen que Nagini
está de paseo por la mansión, nos han desvelado el futuro nada prometedor del
jardinero.
Ah, me hace gracia que en plena
conversación, Frank se quede pasmado al oír la palabra quidditch, por si algún
lector no ha pillado que hablamos de un pueblo de muggles, obviando a los
Ryddle, claro.
En conclusión, es un buen inicio
de capítulo que te deja con ganas de más, sin duda. Estoy deseando ponerme con
el segundo y descubrir toda la historia de los mundiales, el plan de Voldemort
y la información que Jorkins les ha dado. Por cierto, me imagino a Voldemort como la resurrección de Frank en la primera peli
de “Hellraiser”, pero antes de que se reconstruya por completo. Y,
vosotros, ¿cómo os lo imaginabais antes
de las adaptaciones?
Espero que os haya gustado =)
¡Leed mucho!^^
Me encantan los posts de Harry potter, como gran fan que soy los disfruto muchísimo!
ResponderEliminarPor cierto, no conocía tu blog y ya te sigo. Te dejo mi blog por si te gusta también y quieres seguirme: leerenlaluna.blogspot.com.es
Te leo y estaré comentando por aquí :P
Besos:D