¡Bueeeenas!
Volvemos, aunque un pelín más
tarde de lo habitual, con un nuevo comentario sobre Harry Potter y la cámara secreta. Hoy toca el capítulo XIV Cornelius Fudge:
Hagrid es el heredero de
Slytherin o, por lo menos, él soltó a la bestia hace cincuenta años, según el
diario de Ryddle. O sea, que a Harry y cía no les queda más remedio que
investigarlo o preguntarle directamente, como propone Hermione. Además, Lucius
Malfoy consigue echar a Dumbledore del colegio y la señorita Granger es
petrificada junto a otra alumna de Ravenclaw. Todo va de mal en peor en
Hogwarts.
Problemas varios
Como ya he mencionado, Harry se
enfrenta a una supuesta y dura verdad: Hagrid
pudo soltar a la criatura asesina de hace cincuenta años. Su único consuelo
es pensar que con solo trece añitos es normal que quisiera conocer y domesticar
a un ser mágico tal como el de la cámara, ya que todos conocemos su gran afición
por las criaturas mágicas: el perro de tres cabezas, el dragón,…
Además, todos los alumnos de segundo deben elegir optativas para el curso
siguiente, por lo que tanto Harry como Ron y Hermione tienen que decidirse
por la mejor opción puesto que ésta puede ser vital para sus vidas futuras. Por
cierto, a Hermione no se le ocurre otra mejor idea que la de escoger todas…
¡adiós, vida social! ¡adiós!
Alguien ha destrozado la parte de la habitación de Harry y le ha robado el diario de Tom Ryddle y,
¿sabéis qué? Solo una persona de Gryffindor podría hacer algo así, visto que
solo ellos tienen la contraseña para entrar a la sala privada de la Casa.
¿Quién lo habrá hecho?
Pero la palma de los problemas
varios se la llevan estos dos últimos:
Hermione ha sido petrificada junto a la prefecta de Ravenclaw y Albus
Dumbledore ha sido derrocado. ¿Quién da más? Menudo capítulo llenito de
malas noticias, solo nos queda la pista que Hagrid les da a Harry y a Ron antes
de ser enviado a la prisión de Azkaban: “seguir a las arañas”
Dumbledore, Malfoy y Fudge
No podía terminar este comentario
sin mencionar más detenidamente a estos tres personajes:
Cornelius Fudge |
Cornelius Fudge, el ministro de Magia y la persona que da título al
capítulo, solo aparece para echar a los mortífagos al pobre Hagrid por algo que
“supuestamente” sucedió hace cincuenta años y de lo que “supuestamente” él es el
culpable. La fuerza de la política y el bienquedismo
es grande, señoras y señores.
Lucius Malfoy, un ser despreciable padre de otro mini ser
despreciable, quien da el toque final a este capítulo echando de la peor de las
maneras a Dumbledore de su puesto de director. Doce firmas del Consejo Escolar
y ya está todo hecho, ¿cuánto dinero y chantajes le habrá costado? ¡Vaya tela!
Es alucinante que un tipo como éste esté bien visto en sociedad después de todo
lo que ha hecho.
Albus Dumbledore, el Gandalf de Harry
Potter, quien aparece de vez en cuando, lo sabe todo pero nunca hace nada.
Es más bien un inspirador. No acabo de entender muy bien su manera de razonar
la vida, pero, bueno, habrá que seguir leyéndole para conocerle mejor.
En fin, una auténtica cagada eso
de echar a Albus, si él es uno de los magos más poderosos del mundo y se va,
¿quién va a hacer algo al respecto? Pobre Harry, le toca todo a él…
Espero que os haya gustado =)
¡Leed mucho!^^
Tienes razón, Albus Gandalf, digo Albus Dumbledore XD es sobre todo inspirador :-) al menos en estos primeros libros :-)
ResponderEliminarUn beso grande!
Pues aunque no soy nada fan de Fudge, tengo que decir que esta vez hace bien en apartar a Hagrid de Hogwarts. Cincuenta años antes él no era ministro y no tiene que saber más que la versión oficial, y ya ha llegado un punto en el que hay que hacer algo. Eso sí, usar Azkaban como prisión preventiva es una estupidez increíble.
ResponderEliminarJajaja pobre Hermione, vaya foto
ResponderEliminarPero sí, Dumbledore es un personaje difícil, lo sabe todo pero parece que no sabe nada, lo tratan de manera injusta...¿o justa? Siempre me trae de cabeza jaja
Un beso!